Autor: El diseño de esta escultura fue realizado de manera conjunta por el escultor Javier Alonso Márquez y el arquitecto Francisco Lacruz Abad
Localización: Parque Padre Querbes, Calle Fraga, Huesca, España
Emplazamiento: Parque Padre Luis Querbes
Colaboradores: El bastidor -en forma cuadrada dentro del cual se incluye la figura escultórica- fue fundido por el taller Dorta de Huesca.
Materiales: Hierro y bronce
Dimensiones (altura/anchura/profundidad): 500 x 500 x 120 cm
Cronología: 2005
Promotor: Esta obra se incluye dentro del proyecto de urbanización del antiguo complejo deportivo del Colegio San Viator, conocido con el nombre de Estadio Padre Querbes. Este complejo deportivo fue vendido y e
Propietario: Antonio Porta de la promotora Orusa cedió esta escultura al Ayuntamiento de Huesca
Inscripciones: Sin inscripciones
Biografía del representado: El ""Gran Itinere"" es una escultura formada por un bastidor cuadrado de medio metro de lado en cuyo interior se incluye una esbelta figura. Se trata de un hombre aparentemente simple y solitario que camina con los brazos abiertos, en equilibrio y atento para no caerse al abismo del mundo. Éste se representa mediante el vacío, el cual también forma parte de la escultura y le da sentido. Según Roberto Miranda, el escultor “Javier Alonso Márquez pone al hombre en el filo de la existencia (ex-sistencia la llamó Heidegger), en el trance de saltar desde un trampolín, de iniciar un ascenso, de andar sobre el alambre (pura conciencia de abismo, con suelo para los pasos vacilantes de un solo hombre), o de enredarse, impasible, en un laberinto. Al final, ya lo sabemos, está la muerte, otro estar ahí tan incomprensible como el de vivir en el mundo y arrastrar el tiempo con nosotros”. En la obra de Márquez la figura del hombre ocupa un papel muy importante, si bien sus piezas se alejan del concepto tradicional de escultura en el sentido de bloque único monovolumétrico. Tal y como señala Ángel Azpeitia, las figuras de Márquez, si bien no “se perciben como propuestas independientes, separadas del entorno” tienen una personalidad propia muy definida por ser imágenes inquietantes, misteriosas y, sin duda alguna, muy sugerentes.
Crónica: El promotor de las viviendas del parque Padre Querbes, Antonio Porta y el arquitecto Francisco Lacruz se pusieron en contacto con Javier Alonso Márquez para, juntos, crear esta escultura. Entre el escultor y el arquitecto idearon el concepto de la obra y encargaron a los talleres Dorta que realizaran un bastidor o marco en forma cuadrada dentro del cual se incluye la figura escultórica en equilibrio.
Comentario: Esta escultura del Parque Querbes de Huesca está fuertemente marcada por el recuerdo de la obra de Alberto Giacometti. En ""Gran Itinere"", al igual que en la mayoría de las obras de Javier Alonso Márquez, convergen factores importantes como son la idea del espacio, el vacío y fundamentalmente, la sombra que proyecta la escultura que en este caso se acentúa por estar situada sobre un estanque de agua. La aparente sencillez de la figura refleja la complejidad del ser humano, sus laberintos y su vida cotidiana, muchas veces en precario equilibrio. Esta obra no sólo expresa determinadas características visuales, sino que sus formas sugieren interesantes aspectos psicológicos de la figura. Las obras de Alonso Márquez (y ésta que nos ocupa es un claro ejemplo) evolucionan desde el vacío y están protagonizadas por figuras humanas situadas en inverosímiles equilibrios. Los personajes de Márquez (tanto los de sus piezas únicas como los de las series), están dotados de una alta dosis de expresividad, debido a su acentuado esquematismo que se puede relacionar con las obras de Constantin Brancusi, el ya citado Giacometti o incluso con algunas de Picasso. El resultado de sus piezas es que abundan en lo esencial y en las posibilidades expresivas de la materia cuyas perfectas soldaduras trabaja con delicadeza meticulosa en su factura.
Bibliografía: Ángel AZPEITIA, “Personajes y escenarios”, Artes y Letras, en Heraldo de Aragón, 6 de junio de 2002, p. 10. Diana BERGES, “Del hierro a la imagen de la vanguardia”, Diario 20 minutos, Zaragoza, 8 de enero de 2007 p. 21. Diana BERGES, “Equilibrio en hierro”, Diario 20 minutos, Zaragoza, 13 de diciembre de 2003, p. 21. Antonio DOMINGUEZ, “Alonso Márquez”, Diario El periódico, Zaragoza, 21 de diciembre de 2006, p. 6. LLORENÇ ""Maria Teresa Baltasar i Alonso Márquex exposen les seves pintures i escultures a l'espai d'art les quintanes"", El 3 de vulit, 3 de octubre de 2008, p. 78. Guillermo FERNÁNDEZ PEÑA, “Alonso Márquez: la lógica del desencuentro”, Colegio Oficial de Arquitectos de Zaragoza, Zaragoza, 2002. Julian H. MIRANDA, “El curioso diálogo de Carmen Villá y Alonso Márquez”, El punto de las artes, 26 de octubre-1 de noviembre 2001, p. 12. “Obras de Alonso Marquez”, Heraldo de Aragón, Zaragoza, 25 de enero de 2007, p. 62. Roberto MIRANDA, “Javier Alonso Márquez: Solos”, en El Periódico de Aragón, Zaragoza, 25 de abril de 2010. Juan Antonio TINTE, “Pinturas de Paco Campo, esculturas de Alonso Márquez”, El punto de las artes, 18 al 24 de octubre de 2002, p. 16.
Ficha: Natalia Juan García
Biografía del autor: Javier Alonso Márquez nació en 1967 en Zaragoza. Confiesa que desde muy pequeño le gustaba la escultura, en la que se inició, como cualquier niño, con la plastilina. Decidió que de mayor sería escultor, y lo ha conseguido. Le gusta coleccionar objetos abandonados que le hacen pensar de dónde vienen, qué vidas tuvieron sus propietarios, qué función cumplieron o porqué se perdieron. Se trata de piedras, conchas de la playa o troncos dejados por la corriente de un río. No importa su forma ni su valor económico, cualquier objeto le es válido. Lo que busca en ellos es desentrañar su historia pasada. Como creador, imagina figuras que materializa en ligeras y esbeltas esculturas hechas de metales como el hierro, el cobre o el bronce. Su maestro fue el también escultor Alberto Gómez Ascaso, aunque se siente igualmente heredero de la obra de otros grandes maestros aragoneses como Pablo Gargallo y Pablo Serrano utilizando como ellos, el hierro y el bronce. Márquez trabaja el metal con ácidos para darle un aspecto envejecido y personal. Ha realizado cuantiosas exposiciones individuales en Zaragoza, Madrid, Barcelona, Llorenç del Penedès (Tarragona) o Beceite (Teruel) así como numerosas colectivas en Zaragoza, Llorenç del Penedès (Tarragona), Tossa de Mar (Gerona), Cuenca, Villa de Cifuentes (Guadalajara), Beceite (Teruel), Madrid y Barcelona. La pared es el soporte favorito para colocar sus piezas, aunque, en ocasiones, ha llegado a colgarlas del techo, como ocurrió con algunas de las obras que expuso bajo el título ""La lógica del (des) encuentro"" en el Colegio de Arquitectos de Zaragoza en julio de 2002. Sin embargo, también tiene obra pública exenta como es el caso de la fuente-escultura que se emplaza en el hotel Tierra de Biescas y el caso que aquí nos ocupa del parque del Padre Querbes en Huesca.