La alcaldesa de Huesca, Lorena Orduna, ha trasladado a Renfe las reivindicaciones de la ciudad en materia ferroviaria. En una reunión que tuvo lugar el pasado miércoles día 11 en Madrid, la regidora expuso la necesidad de sustituir los convoyes que dan servicio al AVE Huesca-Madrid-Sevilla, mejorar la línea Tardienta-Huesca y la estación intermodal. Además, reclamó más frecuencias de conexión por tren con Zaragoza, en tanto Fomento y el Gobierno de Aragón estudian la posibilidad de un servicio de cercanías con línea entre ambas ciudades.
La alcaldesa viajó a Madrid junto al presidente de la Diputación Provincial, Isaac Claver, en una jornada de trabajo conjunta para exponer en Fomento las necesidades de la ciudad y la provincia en materia ferroviaria. Ambos se reunieron con el director general de relaciones institucionales de Renfe, José Luis Blanco.
La reunión, que había sido aplazada a causa de la emergencia que ha supuesto la DANA, coincidió en la misma semana con la que desarrolló el consejero de Fomento y Movilidad, Octavio López, con quien los dos mandatarios altoaragoneses han coordinado la agenda de su visita a Madrid.
Respecto al AVE, la alcaldesa recordó las averías y retrasos frecuentes del servicio, para reclamar la sustitución de los vehículos y mejoras en la vía. Respecto a los trenes, Fomento estudiará la situación de los vehículos actuales. En todo caso, el Ministerio ha confirmado que los convoyes que prestarán el refuerzo del fin de semana serán más actuales.
La alcaldesa ha solicitado que ese servicio de viernes entre Madrid y Huesca y de regreso el domingo sea permanente y no funcione únicamente durante la temporada de esquí.
Respecto a las cercanías, mientras se estudia la posibilidad de atender un servicio de estas características la alcaldesa reclamó el incremento de frecuencias de conexión con Zaragoza, al menos una más por la mañana y otra más por la tarde, para que sean cuatro relaciones en franja matinal y otras tantas, en verspertina.
Otros asuntos que se trasladaron al Ministerio en materia ferroviaria fueron la necesidad de ampliar la capacidad de la estación intermodal, de cara a la reapertura del Canfranc y para ampliar la capacidad de operar tres AVE.